Fotografías que llaman desde el suelo de rastros, desde álbumes de familia que alguien ha tirado como basura, desde marcos apolillados. Descoloridas, con cicatrices… las imágenes presentan fantasmas y espacios ya desaparecidos, que nadie conoce.
Si camino con los ojos en silencio, reconozco su llamada pidiendo mi atención y no puedo dejarlas atrás.
Lucía Lapoza. Octubre 2022.