“Yo estoy de paso, no voy a ningún
lado, vivo, siento y pinto.
Y me pregunto ¿Por qué pinto? ¿Cuál es el propósito que tiene mi pintura?
Son muchos años con estas chinchetas bajo mis pies. ¿Por qué?
¿Y si no hubiera un porqué?
¿Cuál es el porqué de flor que un día emerge de un cactus?
No sé por qué pinto como nadie se cuestiona por qué bebe agua. Pinto porque es algo natural y necesario para mí.
Mi brocha no rasga, no acaricia, no denuncia, ni es complaciente, no anticipa, no pretende, mi pintura es como la flor que surge del cactus.”